sábado, 10 de abril de 2010

...que pena, de verdad.


P.D: No pases de la raya, ves te lo advertí...por no hacerme caso a mí, tu cabeza estalla.

lunes, 9 de marzo de 2009

¿doblarán por nosotros?


"Estaban tan juntos, que mientras se movía la aguja que marcaba los minutos, aguja que él no veía ya, sabían que nada podría pasarle a uno sin que le pasara también al otro; que no podría pasarles nada sino eso; que eso era todo y siempre, el pasado, el presente y ese futuro desconocido. Lo que no iban a tener nunca, lo tenían. Lo tenían ahora antes y ahora, ahora y ahora. O ahora, ahora, ahora; este ahora único, este ahora por encima de todo; este ahora como no hubo otro, sino sólo este ahora y ahora es tu profeta, Ahora y por siempre jamás. Ven ahora, ahora, porque no hay otro ahora más que ahora. Sí, ahora. Ahora, por favor, ahora; el único ahora. Nada más que ahora. ¿Y dónde estás tú? ¿Y dónde estoy yo? ¿Y dónde está el otro? Y ya no hay por qué; ya no habrá nunca por qué; solo hay este ahora. Ni habrá nunca por qué, sólo este presente, y de ahora en adelante solo habrá ahora, siempre ahora, desde ahora sólo un ahora; desde ahora sólo hay uno, no hay otro más que uno, uno que asciende, parte, navega, se aleja, gira; uno y uno es uno; uno, uno, uno, Todavía uno, todavía uno, uno que asciende, uno suavemente, uno ansiadamente, uno gentilmente, uno felizmente; uno en la bondad, uno en la ternura, uno sonre la tierra, conl os codos pegados a las ramas de los pinos, cortadas para hacer el lecho, con el perfume de las ramas del pino en la noche, sobre la tierra, definitivamente ahora con la mañana del día siguiente que va a venir".



ERNEST HEMINGWAY "Por Quién Doblan Las Campanas"

sábado, 7 de febrero de 2009

tu tienes la culpa...


“Y es que la noche nos va a devorar”, o al menos eso es lo que ella dijo; quizás fuera por su miedo a la oscuridad, o por desviar mi atención, aunque apuesto a que fue por las dos cosas. A mi solo me importó “ese” atardecer nuestro…solo nuestro…. pero como teniendo como invitado especial la calma de la tempestad del un mar con música de fondo propia, siempre...siempre a merced de nuestros pies; deseando que poco a poco me envuelva en papel de regalo dorado un tanto, eso si, nostálgico por que se vuelva a producir aquello que ocurrió hacía algo más de veintinueve segundos; o lo que es lo mismo, casi una eternidad.

Todo era perfecto, o al menos eso creía yo hasta ese preciso instante. No me lo podía creer…sus ojos estaban vaciando toda su ternura sobre mi humilde pecho…no podía ser cierto; la escasa luz que bailaba entre el cuerpo cristalino de sus lágrimas ensalzaban hasta la inmensidad del momento el recuerdo que se tallaba en la parte más valiente de mi mente.

“Tenemos que bajar ya” dijiste…aun no se si te referías al alto que nos poseía o a la nube en la que aún sigo, pero desde luego conseguiste la ideal reacción química para que esas gotas perforaran en un estilo parejo al del ácido la piel que separa tu realidad de mi felicidad…hasta conseguir la aleación perfecta de las mismas…y hacerse el milagro.


miércoles, 29 de octubre de 2008

un pequeño homenaje para el más grande...


Puedo oir tu voz,

en la plaza desierta;

Ya no crecen las flores

para hacer la diadema

que corone tu nombre

en los dias de fiesta.


Y cuando vayan a romperte el corazón,

bajo las banderas

piensa en mí...

Tal vez necesite tu amor,

para mojarme los labios.

Tal vez necesite tu amor

para barrer algún rincón en mi diario de soldado raso...

Tal vez necesite tu amor...


Ha salido el Sol

en las playas de Azenha.

Donde mueren las olas

entre flores y piedras.


Entonces, nadie va a romperte el corazón,

solo las cadenas

piensa en mí...

Tal vez necesite tu amor,

para mojarme los labios.

Tal vez necesite tu amor,

para barrer algún rincón en mi diario de soldado raso...

Tal vez necesite tu amor...


"Piedras y Flores" Quique Gonzalez